Toda empresa debe realizar un análisis de su cartera de productos o servicios periódicamente.
Para el análisis y gestión de la cartera de productos utilizaremos el modelo de la matriz del Boston Consulting Group (BCG). Esta matriz establece cuatro posibles tipos de productos o servicios en función de:
• la cuota de mercado que han conseguido.
• la tasa de crecimiento del mercado objetivo al que se dirigen.
La situación idónea para una empresa es contar con una cartera equilibrada de productos o servicios es decir que tengan diferentes índices de crecimiento y diferentes cuotas o niveles de participación en el mercado para cumplir distintos objetivos que la empresa se plantee: crecimiento, rentabilidad o continuidad.
Una vez analizada la rentabilidad del producto o servicio conviene comprobar una serie de circunstancias que pueden afectar a la rentabilidad del mismo:
– Obsolescencia de los métodos de fabricación.
– Ineficiencia en la producción.
– Mala gestión de ventas, mala distribución o escasa labor de marketing.
Resumen de las principales características de la matriz cartera de productos: