El efecto Cristobal, es el ejemplo de como un empleado, provoca un aumento en la productividad de las empresas con la realización de sus tareas diarias, y la satisfacción de los clientes, generando fidelidad hacia estas compañías. Este efecto, podría haberle llamado el efecto María, Jesus, … o cualquier otro nombre, porque son las personas las que hacen las empresas.
Siguiendo con este ejemplo, es un monitor de ciclo indoor, que tiene una tasa de ocupación de bicicletas, un 30% superior al resto de monitores, independientemente de las horas que imparta la clase de spinning, porque son más exigentes y consigue una mayor implicación e interacción del grupo, por mostrar una alta motivación, un gran entusiasmo y energía dentro de las sesiones.
Por tanto, las empresas tienen que buscar e incentivar el compromiso de las personas que tienen contratadas, porque son la imagen de la misma, y las que generan fidelidad a la marca en los clientes.
La satisfacción laboral de las personas trabajadoras, no solo radica en su retribución económica, sino en la felicidad en su puesto de trabajo, por su desarrollo profesional, por tener un buen ambiente de trabajo, por el reconocimiento de sus logros y del equipo, y por la realización de tareas y actividades que les gusten a los trabajadores, lo que les motiva a salir de sus zonas de confort.
La insatisfacción laboral, suele venir, además de la remuneración económica, por la generación en las empresas de una mala gestión de la competitividad interna, que provoca frustración, envidias y no trabajo en equipo, la incertidumbre laboral y la estabilidad del puesto de trabajo, la incoherencia en la gestión de la empresa, tanto en los objetivos fijados por la dirección como en la política de recursos humanos, etc.
Un buen ambiente laboral implica que las personas tengan relaciones interpersonales positivas, favoreciendo el trabajo en equipo.
Las personas felices, aumentan su productividad, son más dinámicos en sus tareas, más eficientes, cumplen sus objetivos laborales, desarrollan su creatividad, y tienen menos bajas laborales, ven el lado positivo de los retos en el trabajo, teniendo un equilibrio entre su vida personal y laboral.