Dentro de los nuevos modelos de emprendimiento, se encuentra la economía colaborativa, basada en los modelos de compartir y colaborar más que en los modelos de competir y de la individualización.
Este modelo, se diferencia del modelo tradicional, por los siguientes aspectos:
Este modelo económico, en la mayoría de sus actividades, se encuentra en una situación de alegalidad, que las autoridades están intentando regular, para evitar la competencia desleal, la economía sumergida y proteger al consumidor, pero sin impedir el crecimiento de estos nuevos negocios.
El crecimiento exponencial de la economía colaborativa, que se está produciendo en España en los últimos años, se debe:
Como en todos los modelos económicos, muchas empresas lo están utilizando como un mecanismo de marketing, al estar de moda el concepto, pero no hay detrás una filosofía de cultura colaborativa.
Los sectores que están más desarrollados, son el alojamiento y el transporte, pero este modelo, se va a extender a la energía, a la salud y a la educación, obligando a la banca a adaptarse a la financiación de estos nuevos modelos de negocios. Para las empresas culturales, este modelo es una oportunidad de ser rentables, utilizando las tecnologías y focalizándose en el turismo.